Carta de Miedoteca a Juan José Plans

Tenemos que dar una de esas noticias que jamás nos hubiera gustado contar. Nuestro amigo y compañero Juan José Plans fallecía la noche de ayer a los 70 años víctima de un aneurisma. Desde entonces han sido innumerables los medios que se han hecho eco de la noticia, relatando en mayor o menor medida, parte de su vida profesional. Nosotros no queremos hacer lo mismo, nos negamos. Es muy sencillo bucear por la red para encontrar todos los trabajos realizados por Plans y premios que consiguió de manera incontestable. No, nosotros no queremos resumir su vida en unos cuántos párrafos ni realizar un sencillo copia-pega de su biografía. Esta carta va dirigida especialmente a él y a todos aquellos cuyas vidas se cruzaron en algún momento con este genio y maestro gijonés.

Aún recordamos aquellas noches con la sábana y manta por las orejas escuchando sus programas en un ahora viejo cassette de radio. Nos estremecíamos con lo que contaba y cómo lo contaba. Todavía resuenan en nuestros oídos su voz en aquellos magníficos Historias y Sobrenatural. En la memoria miles de momentos para enmarcar, de cómo conseguimos hablar por primera vez con Plans vía telefónica, del café en un bar de Madrid mientras nos daba sus impresiones sobre el cine de terror actual, de sus autógrafos y dedicatorias, cartas que gentilmente contestaba de su puño y letra, de la presentación de El juego de los niños de hace unos años en la que fue un placer asistir junto a varios pesos pesados, compañeros suyos en la radio pública dentro del cuadro de actores...

Nunca se lo supimos decir pero Miedoteca se fundó gracias a él en aquella lejana noche de agosto de hace más de diez años bajo el nombre de Historias y Relatos, página alojada en el alocado hosting de Angelfire. Esta web fue gestada gracias a su trabajo. Trabajo que caló muy hondo en los responsables de la susodicha así como el carisma y personalidad del escritor asturiano. Se nos va un amigo, un compañero, una maravillosa persona, siempre dispuesta a ayudar con una manera de ser que no se olvida ni olvidará. Nadie tenía un mal gesto o palabra hacia su persona. Curiosamente hace poco menos de un mes hablábamos con gente que trabajó en sus dramáticos y todos coincidían que Plans era especial. Tenía un halo magnético como el de los textos que escribía, era imposible no admirarle. Honesto, humilde, trabajador.

Ahora, más que nunca, su alma se torna inmortal. Nos lo imaginamos junto a su querido Edgar Allan Poe contándole lo que hizo con su obra en la radio o en compañía de alguno de esos personajes a los que cobró vida, sintiéndose importante porque lo era. El mejor escritor de ciencia-ficción de nuestro país e injustamente tratado, porque de haberse apellidado Bradbury o Wells hoy la noticia hubiese llegado a todo el mundo, sin excepción. Nos escribía en uno de sus libros una dedicatoria que decía "y gracias por todo" y en la que uno pensaba "¿gracias? las gracias te las tenemos que dar a ti por permitirnos conocerte".

Nosotros seguiremos aquí, echándote de menos pero sin cesar de difundir tu trabajo y el de tus compañeros. Hoy, tristemente, no lo volveremos a pasar tan de miedo con miedo y la luz de la llama de la vela a la que tantas veces hacías alusión se apaga un poco más. No obstante no queremos decirte adiós porque sabemos que un poco de ti reside en cada amante de la radio, en cada amante de lo sobrenatural. No, esto no es un adiós. Esto es un hasta pronto.

Comentarios

  1. Descanse en Paz, este genio de la radio, cine y literatura que hacia que esperara con verdadera ilusión las noche de los domingos.
    Su programa Historias y antes Sobrenatural me transportaba a mundos imaginarios en donde el terror, la fantasia y la ciencia ficción dominaban mi mente.
    Lastima que nadie haya cogido su maravilloso testigo. Hoy los que amamos el radio teatro y los generos literarios que el dominaba, estamos un poco huérfanos.
    Afortunadamente paginas como esta y mi audioteca personal me permiten revivir una y otra vez esas inolvidables madrugadas del domingo al lunes.
    Gracias Juan Jose.

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